El pasaje de Lucas 9: 37-43 narra un incidente en el cual Jesús cura a un niño poseído por un espíritu maligno después de que los discípulos no pudieron hacerlo. Aquí está el resumen: Jesús desciende del monte de la Transfiguración y es recibido por una multitud. Un hombre en la multitud ruega a Jesús que cure a su hijo, quien es atormentado por un espíritu maligno que lo hace gritar y convulsionarse.
El padre le dice a Jesús que los discípulos no pudieron sanarlo. Jesús, expresando su decepción por la incredulidad de la generación y ordenando que el niño sea llevado a Él, reprende al espíritu maligno, lo sana y entrega al niño sano a su padre.
Los testigos quedan maravillados por el poder de Dios, mientras Jesús enseña a sus seguidores sobre la necesidad de una fe sólida y la importancia de la oración en enfrentar desafíos espirituales.
