
Absalón: Superando la traición con el amor de Dios
La traición dentro de la familia es una de las heridas más dolorosas que podemos experimentar. Nos duele más cuando viene de aquellos que deberían amarnos y protegernos. Sin embargo, la Biblia nos muestra que incluso en medio de la traición, Dios sigue obrando y nos da las fuerzas para perdonar, sanar y restaurar.
La traición en la Biblia: Un dolor que no es nuevo
Desde los tiempos bíblicos, la traición dentro de la familia ha existido. José fue traicionado por sus propios hermanos, quienes por envidia lo vendieron como esclavo (Génesis 37). David fue traicionado por su hijo Absalón, quien intentó arrebatarle el trono (2 Samuel 15). Aún Jesús, el Hijo de Dios, fue traicionado por uno de sus discípulos más cercanos, Judas (Mateo 26: 14-16).
No permitas que la traición endurezca tu corazón
El dolor de la traición puede generar enojo, resentimiento y deseo de venganza. Sin embargo, Dios nos llama a reaccionar de una manera diferente. José, a pesar de todo lo que sufrió, eligió perdonar y ver la mano de Dios obrando en su vida (Génesis 50: 20).
Dios transforma el dolor en bendición
Cuando confiamos en Dios, Él es capaz de usar incluso el dolor de la traición para nuestro bien. José pasó de ser esclavo a gobernador de Egipto. David, a pesar de la traición de su hijo, vio la fidelidad de Dios en su reinado. Jesús, aunque traicionado, cumplió el propósito de salvarnos con Su sacrificio.