Job era un hombre recto, rico y con muy buena reputación, que vivía en Uz. Todos a su alrededor lo conocían como un hombre sabio y temeroso de Dios a quien Dios había prosperado en gran manera. La historia bíblica nos narra cómo Job pasó de vivir una vida exitosa y llena de lujos, a perderlo todo y estar muy cerca de la muerte. Veamos cómo sucedió.