Joás tenía siete años cuando inició su reinado. Comenzó a reinar en el séptimo año de Jehú, y reinó cuarenta años en Jerusalén. Su madre se llamaba Sibia, y era de Berseba. Joás hizo lo que es recto a los ojos del Señor durante toda su vida, porque el sacerdote Iehoiadá lo había instruido.
Sin embargo, no desaparecieron los lugares altos: el pueblo seguía ofreciendo sacrificios y quemando incienso en los lugares altos.